Después de poco más de siete meses desde su llegada y de una observación continua de su estado general y comportamiento, el equipo del Santuario de Grandes Simios de Sorocaba, São Paulo, Brasil, realizó con éxito una transferencia interna de recinto.

Yoko “se mudó” a un recinto más pequeño en área, pero con una estructura que favorece la interacción con los chimpancés vecinos. El recinto en el que vivía era muy amplio y fue importante durante los primeros meses de adaptación. Sin embargo, demostraba miedo al escuchar a otros chimpancés alrededor y caminaba poco por el área abierta, permaneciendo más tiempo en el dormitorio (área interna).

El nuevo espacio tiene ventanas que permiten el contacto visual con chimpancés que habitan en el mismo complejo, lo que favorece la ambientación y la evaluación de posibles integraciones. Además, cuenta con un túnel y una pasarela, además del área externa, ampliando las posibilidades de exploración e interacción.

Después de instalarse en el nuevo recinto, Yoko mostró un comportamiento exploratorio y una actitud tranquila, lo que indica una buena adaptación al cambio. Se muestra claramente alegre: emite señales de satisfacción con vocalizaciones y siempre está animado llamando a los cuidadores para jugar. Se está alimentando bien y ya recorrió todo el recinto, incluso la tierra y la grama, algo que antes no hacía.

Sus nuevos vecinos se mostraron curiosos, especialmente #chimpCeciliaArgentina, que lo observó durante largo rato intentando llamar su atención. Por el momento, la interacción de Yoko con otros chimpancés seguirá siendo a distancia, y todo será acompañado y evaluado atentamente. Afortunadamente, el hecho de que se esté mostrando seguro y confiado es una excelente señal de progreso, considerando el perfil altamente humanizado de Yoko (ver más en las publicaciones fijadas).

El equipo continuará acompañándolo con toda la paciencia necesaria, respetando su tiempo y animándolo, siempre que sea posible, a interactuar y “recuperar” su comportamiento natural.